lunes, 21 de julio de 2008

Salvemos al Burgos CF

La plataforma SALVAR AL BURGOS C.F. formada por socios, peñas y aficionados de nuestro Club de Fútbol, desea comunicar a todos los socios y aficionados del fútbol burgalés, que a raíz del descenso deportivo que sufrió el Burgos C.F. a la tercera división del fútbol nacional, se han desencadenado unos acontecimientos que han derivado en la más que posible desaparición del club de fútbol que porta el nombre de nuestra ciudad, lo cual no solo significaría la pérdida del equipo profesional sino también probablemente la de las categorías inferiores que cuentan con 13 equipos y 300 niños y jóvenes burgaleses compitiendo y trabajando en ellas así como la de la sección de fútbol sala y de varios puestos de trabajo. De consumarse la situación, el desprestigio del fútbol burgalés, que sumaría 3 vergonzosas desapariciones, tendría un alto calado a nivel nacional, siendo nuestra ciudad la única capital de provincia que no contaría con un equipo en categorías nacionales. La primera medida adoptada fue la solicitud de una audiencia con el Alcalde de la ciudad, D. J. Carlos Aparicio a los efectos de exponerle la gravedad del asunto y de las consecuencias nefastas para el conjunto y la imagen de la ciudad, así como las posibles soluciones que podrían darse a imagen de otras ciudades de nuestro entorno cercano. La reunión, celebrada el viernes 18 de julio, fue de entendimiento de la situación de ambas partes y de las medidas que cada uno, dentro de la medida de sus posibilidades, pueden tomar para evitar lo que ninguno deseamos. Asimismo, los responsables municipales, mostraron su mayor disposición para que las categorías inferiores continúen con su labor independientemente de lo que suceda con el primer equipo. Otra de las medidas de urgencia adoptadas para intentar revertir la situación ha sido la apertura de una cuenta corriente mancomunada, que necesita de la firma de varias personas para disponer de los fondos, para que los socios y aficionados aporten lo que puedan en la medida de sus posibilidades, y que se gestionará con la transparencia que merecen los que en ella depositen su dinero, proporcionando claves de internet a partir del día 1 de agosto, para que cualquier persona pueda ver sus movimientos bancarios. Asimismo hemos abierto la siguiente dirección de correo electrónico para que cualquiera pueda ponerse en contacto con nosotros: salvaralburgos@hotmail.com. Lo recaudado en dicha cuenta se destinará única y exclusivamente a pagar las deudas contraídas con los jugadores, y en ningún caso para negociar con los actuales gestores (Familia Novoa) su salida del club. Los ingresos deben realizarse dejando claro la identificación del ordenante, indicando nombre y apellidos o razón social, para que en caso de que las gestiones sean infructuosas, se proceda a la devolución de las sumas aportadas. En el concepto del ingreso sería importante además indicar un número de teléfono o un e-mail. Es por eso que las mismas se deben realizar a la máxima brevedad posible, para poder negociar con los jugadores y que las denuncias presentadas ante la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles) se retiren antes del 31 de julio, fecha límite y ante la cual, si no se han solventado, se produciría un nuevo descenso de nuestro club a Regional Preferente. El número de cuenta en el que se pueden realizar las aportaciones es: 2018-0000-69-0001458472 Por ello queremos pedirte que si sientes nuestro club, y has sufrido y vibrado con él a lo largo de estos años de alegrías y sinsabores deportivos, aportes lo que creas conveniente y nos ayudes a intentar salvar al Burgos Club de Fútbol.
NO TE QUEDES DE BRAZOS CRUZADOS, ENTRE TODOS LO CONSEGUIREMOS!!! AUPA EL BURGOS C.F.!!!

lunes, 7 de julio de 2008

No a la fusión de las cajas

Volvemos, después de un tiempo, a leer noticias sobre una fusión de las cajas de ahorro que tienen su sede en esta Comunidad Autónoma. La noticia, publicada en un periódico de Valladolid, aludía a la integración de las carteras de participaciones industriales y de las obras sociales, como paso previo a la fusión. Esto, supuestamente, no se produce como resultado de una negociación entre los directivos de las propias entidades, sino de unos acuerdos alcanzados entre representantes de los dos partidos mayoritarios. Ante esta noticia, me pregunto en primer lugar: ¿quienes son estos señores para negociar en nombre de unas entidades a las que no representan, ni en las cuales tienen puesto alguno en el organigrama directivo?. Se ve claro que son los políticos los que quieren meter mano en la caja y nunca mejor dicho. Quieren disolver unas cajas de ahorro, como son las dos de Burgos, la de Segovia y la de Ávila (las cuatro castellanas), muy vinculadas a su tierra a través de la captación del dinero de pequeños ahorradores y con una importante obra social, para fundirlas con otras y crear una macro-caja (con sede en Valladolid, por supuesto) que al carecer de esa vinculación local tan estrecha pueda ser manejada mejor por la clase política autonómica. En segundo lugar, ¿a qué lógica de los mercados financieros responde esta supuesta operación?; dicen que el problema es un tamaño inadecuado para responder a los desafíos de la inversión en la bi-región; pero ¿cuál es el tamaño óptimo?; tal vez haya que iniciar después un proceso de fusión de las cajas de ahorro de toda España, porque se requiere un tamaño más grande, y después ¿por qué no unificar todas las cajas de ahorro de la Unión Europea?. Esto es absurdo, el ahorro de burgaleses, segovianos y abulenses está bien gestionado por unas cajas de ahorro que tienen unos buenos índices de eficiencia y unos beneficios que han repercutido en el bienestar de sus provincias. ¿No hemos oído repetir hasta la saciedad que el ahorro captado debe ser reinvertido en el territorio donde se ha generado?; pues bien, señores políticos, el ahorro de burgaleses, segovianos y abulenses que siga quedándose en su tierra. Pretenden ustedes acaso que, con el ahorro de abulenses, segovianos o burgaleses, se financien sus proyectos políticos en Valladolid o en otros lugares, o se contribuya al apuntalamiento de sus redes clientelares. Si finalmente consiguen su propósito nos vamos a encontrar con una gran entidad en la que no nos reconoceremos, con la que no nos identificaremos; controlada y manejada a su antojo por la clase política; que invertirá atendiendo a criterios oportunistas o políticos; con una obra social diluida en un territorio bastante superior al de la mayoría de los estados europeos; una caja que escapará por completo al control de sus empleados e impositores. Es momento de oponernos con todas las fuerzas, como burgaleses y castellanos, a esta monumental estafa que nos preparan bajo el lema de “mayor músculo financiero”.
Lesmes Peña